¡Wanda asesina, queremos guillotina!
Gritos de los protestones en la marcha convocada por René Pérez ayer
Cortesía de NOTICEL
Si usted cree que el vandalismo a un carro de Noticentro —Por cierto, aliados de los organizadores de la marcha— o la herida de un policía, los gases lacrimógenos o un anarquista rompiendo los adoquines, fue lo más espeluznante de lo que pasó en la "Marcha de la indignación" se equivoca.
El hecho de traer una guillotina a una protesta y pasearla por las calles, no debe tomarse a la ligera.
Juzgue usted...
Para Francia, que desde hace siglos presume de ser la "patria de los derechos humanos", la tesis de Quétel es tan simple cuanto inaceptable: la Revolución fue una orgía de sangre desde el principio y no mantuvo ninguna de sus promesas. No inventó los derechos del hombre, defendidos (aunque no con este nombre) desde los comienzos de los tiempos por el cristianismo; no fue la primera en ponerlos por escrito en la ensalzada Declaración del 26 de agosto de 1789, puesto que la Declaración de independencia americana ya los había proclamado en 1776. Y, sobre todo, no los aplicó ni durante sus diez años de vida convulsa y mortal, ni después...
Ningún artículo de la Declaración fue tan maltratado como el que debía garantizar el derecho del acusado a un juicio justo. En la época del Terror, bastaba una habladuría para ser condenado por el Tribunal revolucionario y guillotinado ante una multitud de 200.000 personas que, ante cada cabeza que saltaba tras ser cortada, gritaba entusiasmada: "¡Viva la República!". Las acusaciones no tenía que ser demostradas ("¿Para qué sirven los testigos?", se preguntaba impaciente en 1793 el Torquemada humanitario, Antoine Quentin Fouqier-Tinville). En 1794, el Tribunal revolucionario abolió los testigos, los abogados, los interrogatorios y los procesos que duraban más de tres días porque "la lentitud es un crimen, la formalidad un peligro público"; además, no se trata de "castigar a los enemigos de la patria, sino de ¡aniquilarlos!". Ni Stalin o Hitler lo hubieran expresado mejor.
La guillotina hace de telón de fondo a la Revolución a partir de 1792; es imposible decir cuántos miles de personas perdieron la cabeza (33 al día de media sólo en París) por haber apoyado la monarquía, o por haber hablado mal de Robespierre, o por haber celebrado misa, o por haber comido ese rarísimo pan blanco. Carros cargados de decenas de "enemigos del pueblo" llegaban cada día al patíbulo, como explicaba una viñeta que estaba de moda en 1793: "¿Hay guillotina hoy?", pregunta un sans-culotte. "Sí, porque siempre hay traidores", responde el otro.
El historiador Claude Quétel sacude la complaciente versión oficial¿Se repite la historia?
«La moderación se convirtió en un crimen»: por qué la Revolución Francesa desembocó en la guillotina
https://www.religionenlibertad.com/cultura/896294606/moderacion-crimen-revolucion-francesa-guillotina.html
Cortesía de una página de Carmen Yulín Cruz en Facebook
¿Y usted cree que esto se justifica?
Eso lo aprendieron de la revolución cubana...
Cuando usted ve a una turba revolucionaria cargar con una guillotina, no piense que esta es una expresión "cultural" para "adornar artísticamente" una protesta, esto es una aberración política e histórica de quienes se dicen ser defensores de los derechos humanos.
¡Mentira!
Ninguno de los que participaron de la marcha son víctimas del gobierno, son verdugos y así se comportan.
Death to America? ¿En un territorio de los Estados Unidos? ¿No es esto razón para investigar? ¿Debemos esperar a que asesinen a un político o a cualquier estadista?
René Pérez, Yadiel Molina, Ricky Martin y todo aquel que se une a esta protesta sin tener conciencia de la historia porque son influenciados por comunistas de otras tierras, son unos irresponsables y terroristas, —sí, crear terror y desasosiego, es terrorismo — merecen la rechifla y repulsa de todo el pueblo de Puerto Rico.
Se demostró, no sólo en las encuestas que hicieron los medios, sino en la poca asistencia, a una marcha que no le resuelve absolutamente nada al pueblo de Puerto Rico, mucho menos a los damnificados del terremoto que están siendo atendidos por el gobierno, iglesias y grupos comunitarios, pero sí a los partidos de izquierda de la fauna socialista boricua.
Las elecciones no se adelantan por capricho de un artista y una minoría que protesta. El desconocimiento del pupilo de Hugo Chávez, René Pérez de como funciona un gobierno respetando las leyes y la Constitución, demuestra su falta de respeto al orden y concordia que debe reinar en cualquier país democrático, obvio, quien tiene amistad con comunistas no puede pensar de otra manera. Sin embargo, no es lo suficiente valiente para renunciar a las ganancias que le da su carrera viviendo en un país capitalista, eso lo convierte automáticamente en un hipócrita.
Más que la marcha de la indignación, debe pasar a la historia como la marcha de los verdugos de la guillotina.
¿Qué podemos esperar los puertorriqueños de estos salvajes?
¿Guillotina?
¿En pleno siglo XXI, estos salvajes nos quieren llevar a vivir como en el siglo XVIII?
Ya es hora de decir ¡Basta!
Los puertorriqueños lo que quieren es vivir en paz dentro del caos en que se encuentra luego de un terremoto. No necesitan que le paseen una guillotina por las calles vandalizadas del Viejo San Juan.
¿Quién es el corrupto? Las diferencias se resuelven en las urnas, no rompiendo adoquines y tirando piedras y vandalizando propiedad pública y privada, eso es de salvajes anarquistas. Los puertorriqueños no somos un pueblo salvaje.
La Policía de Puerto Rico ha sido más que decente, han sido unos héroes al tener que tolerar la anarquía bajo la excusa del derecho a la protesta pacífica, ya esto se pasó de ese derecho a violación de leyes y reglamentos. Esto no se tolera en países comunistas porque los reprimen con tanquetas y disparos de la Guardia Nacional como se ha visto en la Venezuela de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
Los derechos que hemos alcanzado los puertorriqueños gracias a los Estados Unidos, porque ni tan siquiera en los 400 años de ser colonia de la España de los Reyes Católicos, tuvimos derechos democráticos y libertades como en el presente ¿y esta partida de anarquistas y delincuentes nos quieren hacer creer que ellos están defendiendo al pueblo y que nos respetan? Ese embuste no se lo creen ni ellos mismos.
Agredir a la prensa es agredir al país. Es atentar contra el derecho a la expresión. Es pretender silenciar. Noticentro ha sido foro para que todas las partes se expresen en todas las controversias, incluyendo esta. Las agresiones de anoche tienen que ser rechazadas de una manera contundente por todos.
Los que convocaron a la actividad de ayer deben asumir cierta responsabilidad y los exhortamos a que se unan a condenar estos actos y eviten la complicidad.
Editorial de Noticentro: "Agredir a la prensa es agredir al país"¡Ay Lenin! Tu eres parte de esto.
Nuestro director de noticias Rafael Lenín López recalcó que Noticentro rechaza cualquier agresión contra su equipo de trabajo.
Por: NotiCentro.tv
https://www.wapa.tv/noticias/locales/editorial-de-noticentro---agredir-a-la-prensa-es-agredir-al-pais-_20131122468689.html?fbclid=IwAR3B6B6gf5WQIkqyBN32-2QVVVEnACn29KPUu55HVPkiU0trb-BN-yyd53I
La prensa colonial ha sido cómplice y sirvieron de auspiciadores de los que convocaron la marcha, les dieron foro en sus páginas y reportajes, hasta han coreado sus consignas.
Anoche no sólo fue el carro de Noticentro, también los del pueblo...
Para mí, la reacción de rechazo del pueblo hacia estos irresponsables que han destruido la economía y desestabilizado el Gobierno de Puerto Rico al obligar a renunciar un gobernador legítimo porque su seguridad física y la de su familia estuvieron en peligro, debe ser manifiesta, porque un pueblo que permite esto quedándose callado, está destinado a una dictadura marxista-leninista, disfrazada de revolución del proletariado, que lo que trae es totalitarismo, salvajismo, muerte, hambre y miseria, así ha sido a través de la historia y en el siglo XXI con la versión del comunismo a la cubana en América Latina, que ha traído de vuelta la esclavitud, y no será diferente en Puerto Rico.
Lo más que me indigna es el silencio del FBI y Homeland Security.
¿Qué están esperando? ¿Un mártir?
Such is Life!