miércoles, 4 de julio de 2018

¿Diáspora? NO, somos Yanquis y Boricuas


Really?
Diáspora: Implica la dispersión de grupos étnicos o religiosos que han abandonado su lugar de procedencia originaria y que se encuentran repartidos por el mundo. Si mayoritariamente el término ha sido empleado para referirse al exilio judío fuera de la Tierra de Israel y la posterior dispersión del pueblo judío por el mundo, se ha ampliado su significado para designar todo pueblo que se encuentre diseminado fuera de su país de origen. WIKIPEDIA
Si los puertorriqueños somos ciudadanos americanos... 
¿Por qué nos llaman diáspora en Estados Unidos?
¡Ahh, esa es una pregunta muy interesante!
Veamos...
La nacionalidad o ciudadanía estadounidense es el estatus de una persona física como miembro legal de los Estados Unidos. Implica derechos, privilegios, inmunidades y beneficios económicos incluida la asistencia federal. De acuerdo con la Cláusula de ciudadanía de la Decimocuarta Enmienda a la Constitución, una persona es ciudadana estadounidense automáticamente al nacer en Estados Unidos, al nacer en otro país siendo hijo de padres o abuelos estadounidenses o habiendo nacido en otro país a través de un proceso de nacionalización; uno de los ejemplos históricos más famosos fue la nacionalización estadounidense del científico Albert Einstein en 1940. WIKIPEDIA


Y Donald Trump es nuestro presidente.

De Venezuela se fueron por la dictadura no por un huracán y se convirtieron los venezolanos en diáspora...
Especialistas de todo el mundo reconocen en el fenómeno de la diáspora venezolana, características excepcionales. Me referiré a tres de los factores que más se repiten cuando se analiza lo que está ocurriendo. En primer lugar, el carácter de huida que, en tan corto tiempo, se ha producido: alrededor de 3,5 millones de personas en el transcurso de una década. Fuera de Venezuela impacta y causa sorpresa la actitud de “salir en las condiciones que sea”, del país. Nuestros compatriotas huyen, abandonan el país con desesperación. El pensamiento de fondo es que, cualquier realidad fuera de las fronteras venezolanas, es mejor que padecer el estado de cosas creado por el régimen de Maduro y Cabello.
En segundo lugar, resulta llamativo el nivel académico que tienen cientos de miles de esas personas. Esto no se refiere, de forma exclusiva, a la calidad de la educación con que partieron de Venezuela, sino a consideraciones más amplias y significativas: la visión cosmopolita, la multiplicidad de intereses, el dominio de otras lenguas y, muy importante, la disposición a seguir aprendiendo.
El tercer elemento puede sintetizarse en la palabra ‘actitud’. No predomina el derrotismo en la diáspora venezolana. Al contrario, la gran mayoría sale en pos de un trabajo, a darle forma a emprendimientos, a buscar oportunidades para mostrar los talentos y la disposición a lo productivo. Los venezolanos que se marchan no llegan a otros países a tocar las puertas de oenegés, sino las puertas de empresas donde puedan encontrar un trabajo remunerado.
El potencial de la diáspora
Por Miguel Henrique Otero
lunes, 2 de julio de 2018

Lo mismo sucedió con Cuba, huyeron los ricos y profesionales que creen en el capitalismo y la libertad de conciencia, convirtiendo a Miami en una metrópoli latina.
¿Y Puerto Rico qué?
Si no vivimos en dictadura, a pesar de lo que puedan decir los independentistas...


Por causa de nuestra condición colonial.
Y es que la diáspora puertorriqueña en los Estados Unidos  está lejos de ser uniforme, con algunos lugares mostrando altos niveles de pobreza y dependencia económica, como ocurre en Puerto Rico, y otros con poblaciones en las que predominan los soldados, ejecutivos administrativos y oficinistas.
La Encuesta de la Comunidad del Negociado del Censo del 2014, la más reciente disponible, sin embargo, muestra algunas tendencias generales. Por ejemplo, el 24% de los boricuas con empleo en los Estados Unidos se dedican a labores relacionadas con la salud, la educación y los servicios sociales. Este renglón es seguido por el 13% de los puertorriqueños en EE.UU. ocupando puesto de ventas al detalle.
Si se toma en cuenta que el estimado más reciente pone viviendo en los Estados Unidos a 5.3 millones de puertorriqueños, de los cuales 2.1 millones tienen empleos, esto implica que en el 2014 había 493,925 trabajadores en las áreas de la salud, la educación y la asistencia social y un cuerpo de 267,542 vendedores, según los datos del Censo. Si la diáspora boricua en los Estados Unidos fuera representada por un grupo de 100 personas, sus características laborales comenzarían con 62 puertorriqueños formando la fuerza laboral, de los cuales siete están buscando empleo o se catalogan como desempleados.
La mayor parte de los 55 que tienen empleos están en el sector privado. De hecho, solo ocho personas tendrían trabajo en alguna oficina gubernamental y dos tendrían trabajo por cuenta propia...
Ese mismo grupo de 100 personas también tendría algunas características socioeconómicas destacables. Por ejemplo, tres personas vivirían en una institución carcelaria. El resto están distribuidos en 32 hogares de los cuales diez dependerían para subsistir de de cupones de alimentos como el Programa de Asistencia Nutricional en Puerto Rico.
Estos y otros datos recopilados por el Negociado del Censo, sin embargo, varían según el estado donde están localizados los puertorriqueños y la actividad económica y social de la jurisdiccion donde se desenvuelven,
Es decir,  las características de la población boricua en los Estados Unidos parecen depender de las oportunidades económicas, educativas, entre otras, a las que tienen acceso en el área geográfica donde decidieron radicarse.
Vistazo a la diáspora puertorriqueña en los Estados Unidos
Los niveles educativos, de ingresos y los trabajos que realizan dependen de la jurisducción donde viva la persona en EE.UU.
domingo, 15 de mayo de 2016
Por Ricardo Cortés Chico
¿Diáspora puertorriqueña? Really?
Los puertorriqueños de la “diáspora” en los Estados Unidos no han alcanzado el nivel de excelencia educativa y profesional que se espera de un pueblo culto... ¿Por qué?
¿Nos han manipulado a través de la educación y propaganda cultural anti-yankee?
¿No se supone que la izquierda son los intelectuales y paladines de la cultura?
¿O es todo lo contrario?
Nos han inculcado la cultura de la cuneta, incapaz de entender el por qué tenemos una Junta Fiscal nombrada por el Congreso Federal. Nos hablan de dictadura, de que no somos libres, etc.
¿Mienten? Of course!


Por eso tenemos a ciudadanos americanos protestando por razones absurdas.

La diferencia es, que en el caso de Venezuela, el “pueblo”, los llamados pobres, escogieron creerle a un líder populista llamado Hugo Chávez y lo eligieron presidente, que les ofreció ayudarlos a salir de la pobreza sin sacrificar las libertades, un gran embuste, luego se convirtió en dictador, heredándole tal infamia a un individuo con menos inteligencia y más mezquino que él, Nicolás Maduro, que han creado una mafia de narcos que se han dedicado a perseguir y asesinar. Esa en la tragedia de la diáspora venezolana, no tienen el recurso de sacar un tirano del poder por la vía democrática.


Quienes tengan un alto grado de inteligencia y discernimiento saben, que ningún político es capaz de eliminar la pobreza, el único que puede lograrlo es el individuo educándose en una carrera u oficio, y lo más importante con libertades y derechos constitucionales, trabajar muy fuerte y ser excepcional en lo que decida hacer.

Esa libertad nos la otorga la ciudadanía americana y que los estadistas defienden sin dejar de ser puertorriqueños.


Los venezolanos perdieron todo eso, en el caso de los puertorriqueños, no.
La pregunta es... ¿Por qué lo puertorriqueños que llegaron a Nueva York y Florida no han podido conseguir trabajo y encaminar sus vidas según informa la prensa?
Porque sólo son buenos para que voten a favor de los demócratas y superar el voto de los exiliados cubanos que es republicano. En New York, evitar que los puertorriqueños voten por el GOP.
Veamos...

#VAMOS4PR es una organización demócrata.

En New York, hacen simposios con un fin específico, VOTAR por los demócratas.

Goal: To examine various aspects of stateside Puerto Ricans’ political participation and engagement, especially as they relate to the ongoing presidential season and the role that community organizations and leaders play in swing states with large number of Puerto Rican voters (OH, FL, and PA). Panelists are engaged in political mobilization at the local level and are part of broader coalitions for voter registration and mobilization.
2016: Puerto Rican Diaspora Summit this Friday and Saturday in Manhattan
La prensa niuyorquina tiene una guerra a muerte contra el presidente Trump y usan a los puertorriqueños para tergiverzar las noticias, por eso es que el presidente los acusa de ser fake news. ¿Nos vamos a dejar manipular?

Y en Florida también están muy bien encaminados en la agenda partidista...

Este trabajo surgió en respuesta a la necesidad de conocer a la creciente comunidad boricua y se realizó una encuesta del 10 al 20 del pasado mayo, a través de llamadas telefónicas a 1,000 puertorriqueños residentes en Florida, de los cuales 257 emigraron tras el devastador huracán María.
“Cuando sucedió (el huracán) María, la Universidad (FIU) tuvo mucho interés en tratar de ver quiénes eran los estudiantes que nos estaban llegando, pero además queríamos saber un poco de lo que está pasando en la Florida”, explicó Gamarra poco antes de abundar en los hallazgos del sondeo, que fueron presentados el pasado sábado, en el Simposio “Nuestro Futuro”, realizado en el Centro Graham de la FIU y liderado por la Alianza Puertorriqueña de Florida (PRAF) y el Concejo de Liderazgo Puertorriqueño del Sur de Florida.
Decenas de líderes educativos, políticos, comunitarios y empresariales se dieron cita en el evento para conocer de primera mano los resultados del estudio y compartir sus impresiones sobre lo desafíos que enfrenta la comunidad puertorriqueña.
Entre los descubrimientos más relevantes del estudio, destaca el hecho de que al menos 55.9% de los encuestados aseguró que piensa quedarse a vivir en Florida de manera “indefinida” y otro 41% dijo no tener idea de cuánto tiempo piensa quedarse viviendo en el estado. A la pregunta de si piensan regresar a Puerto Rico en un futuro, 43% respondió que no, 32% que sí y 25% todavía no lo tiene claro.
“Todavía no se ha dado una ola de retorno a Puerto Rico porque la infraestructura no está capacitada para recibir una gran migración de retorno y lo que nos dice nuestra encuesta es que los puertorriqueños han venido a quedarse”, insistió Gamarra.
Esa presencia boricua “tiene un impacto sobre nuestro sistema educativo, a todos los niveles, y tiene un impacto sobre nuestra sociedad”, añadió.
Para el académico, no existe la menor duda de que la comunidad puertorriqueña en Florida está en vías de superar a la cubana que, según dijo, es la más conocida en el estado por ser “muy organizada y prolífica en autoestudiarse”.
“En números, el Censo dice que hay 1,065,000 puertorriqueños y hay 1,200,000 cubanos. La proyección del Censo (es del 2016)… Si pensamos que esa cifra es pre-María, el efecto María te va a poner cerca de 1.2 millones de puertorriqueños en Florida y la proyección es que vienen más aún”.
Entre los 1,000 boricuas que respondieron al estudio, un 26% de los que se mudaron entre 2017 y 2018 ve como probable que otros familiares sigan sus pasos y solo 18.1% descarta esa posibilidad.
Contrario a los puertorriqueños en Nueva York, todavía en Florida la comunidad no está tan estudiada y sólidamente organizada, por lo que los resultados de “Puertorriqueños en la Florida” se presentan como una guía que permite conocer quiénes son, dónde están, cuáles son sus mayores desafíos y cuál es su preferencia política.
Las dos principales razones que tuvieron los encuestados para dejar la isla fue la búsqueda de trabajo (19.8%) y mejorar su calidad de vida (19.2%). Solo 10.8% mencionó el huracán María como el motivo que lo llevó a emigrar.
En cuanto a su afiliación política, el 57.1% dijo estar registrado como demócrata, 12.1% como republicano y 17.9% como independiente.
El 42% de los encuestados tiene una mala opinión del presidente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump. Sin embargo, el gobernador del estado, Rick Scott, y el senador Marco Rubio, del mismo partido, sí cuentan con más de un 40% de aceptación entre los boricuas, así como el senador demócrata Bill Nelson, quien también supera el 40% y este sábado compartió con los líderes puertorriqueños congregados en el simposio.
Un estudio evidencia el poder de los votantes boricuas en Florida
Con una población que sigue aumentando, los puertorriqueños podrían tener un gran peso electoral en este estado
lunes, 2 de julio de 2018
Por ELNUEVODIA.COM
¿Qué les parece?
Nos tratan como comunidad hispana
Los puertorriqueños son esa “diáspora” que han encapsulado en la política, porque son ciudadanos y pueden votar inmediatamente que se registran, la tragedia es, que los siguen considerando un grupo étnico, no llaman diáspora y no como parte de la sociedad estadounidense, obviamente esto sucede por nuestra condición territorial y la propaganda independentista, pero ahora, para votar, no lo es.


¿Encrucijada?

Si bien es cierto que los puertorriqueños tienen una alta escolaridad, eso no ha sido resaltado como atributo y me atrevo a apostar que la primera razón es un sistema educativo politizado, incapaz de enseñar efectivamente el idioma inglés como segundo idioma, el mismo argumento que usa la izquierda boricua para que veamos a Estados Unidos como el imperio que nos impone su idioma y que su retórica es, que somos hispanos y debemos buscar pertenecer a la Patria Grande como una república independiente.

La realidad es, que los boricuas tampoco se sienten identificados con el resto de los latinos y sus culturas, porque somos estadounidenses desde hace 120 años, a pesar de todos los obstáculos que nos han impuesto en la isla para lograr la estadidad.


Resulta curioso que los independentistas que se oponen a la Junta Fiscal y piden la independencia, son los primeros que exigen al gobierno federal que envien ayudas y dinero para los damnificados por el huracán, para mí es incongruente. Yankee go Home! para la política pero para lo demás no. ¿Hipocresía?

¿Es la educación de los puertorriqueños excelente?
Si comparamos con el resto de los estados no.
Si observamos lo que dicen los presidentes “de derecha” en América Latina podemos conseguir la respuesta a la pobreza que tanto denuncia la izquierda boricua...
Pocos días atrás, horas antes de reunirse con el resto de los jefes de Estado del G-20, en la cumbre de dos días que se llevó a cabo en Alemania, el presidente Mauricio Macri habló de su compromiso con la educación como clave para el desarrollo. Durante un concierto solidario celebrado en Hamburgo, en el que participaron artistas de la talla de Shakira y Coldplay, convocado para reclamar a los líderes mundiales que adopten medidas para eliminar la pobreza, el Presidente resaltó el papel de la educación para alcanzar dicho fin: "Siento que nada es más importante en el mundo que la educación, lo lograremos juntos las personas, los países y toda la comunidad intencional".
Esta declaración se encuentra en consonancia con su respuesta al tuit de Rihanna, quien solicitó a los presidentes que aumentasen el gasto en educación. Macri le contestó también por Twitter: "La educación está en el centro de nuestros objetivos y sólo la educación puede cambiar el mundo", refraseando aquella famosa sentencia pronunciada por Nelson Mandela muchos años atrás: "La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo".
"La educación es la hoja de ruta para salir de la pobreza"
Edgardo Zablotsky
Ph.D. en Economía en la Universidad de Chicago, 1992. Ejerce los cargos de Profesor Titular y Vicerrector de la Universidad del CEMA.
¿Cierto?
¿Hora de exigir una mejor educación en Puerto Rico para salir de la pobreza? ¡Claro que sí!

Los puertorriqueños debemos luchar para salir de la pobreza y la manipulación política que nos ha estancado por los pasados 120 años, principalmente el Partido Demócrata, el PPD y los partidos de izquierda, esa es la verdad.

Pero, esa es una lucha colectiva que ningún líder político lo puede hacer por nosotros.


El activismo cubano es excepcional y merece respeto.

De lo primero que nos tenemos que distanciar, es de que nos etiqueten como “diáspora”, no lo somos, somos ciudadanos estadounidenses y lo seguiremos siendo porque lo queremos y así lo han demostrado los últimos dos plebiscitos, donde reafirmamos que queremos convertimos en estado. Entonces, seguimos siendo puertorriqueños, como son los tejanos, los niuyorquinos y los floridianos, que nos mudamos a otro estado, buscando un mejor empleo, para estudiar o simplemente cambiar de ambiente, no huyendo por una crisis política.


Los puertorriqueños tenemos que apoyar a los exiliados cubanos 
en su lucha por la libertad de Cuba.

La pobreza nos ancla en un círculo vicioso de ignoracia, prejuicios, mitos y miedos donde los únicos que se benefician son los políticos con promesas que nunca van a cumplir, pero ellos serán electos con nuestros votos, eso será igual en Jayuya como en Orlando. 

Los puertorriqueños debemos darle nuestro voto a quienes representen nuestra ideología, no por su populismo y demagogia en una tribuna, eso no nos va a resolver nuestros problemas. Si lo que quieren los puertorriqueños es una buena educación para superar la pobreza y levantar la isla de la crisis en que se encuentra, si vuelven, debemos darle el voto a quien se comprometa a convertir a Puerto Rico en un estado y en el futuro una metrópolis en el Caribe, lo demás es bobería.


Nuestras raíces existen y eso no se puede borrar.

Dice el Editorial de El Nuevo Día...

Es tiempo de hacer que el bien común prevalezca sobre el egoísmo partidista. Cuando lo que está en juego es la recuperación de la economía y el futuro del pueblo, las estrategias de tranque y confrontación son una traición a Puerto Rico. La cordura tiene que imperar.
Es hora del consenso por el bien de Puerto Rico
martes, 3 de julio de 2018

¿Egoísmo Partidista?
¿Hora del consenso?
¿Dirían lo mismo si gobernara el PPD?


Los primeros que deben hacer introspección son los anti-penepés, los anti-estadistas y anti-republicanos, y respaldar a dos partidos que ganaron las elecciones, a una Junta Fiscal que ha sido nombrada por el Congreso de los Estados Unidos, que es nuestra nación, para resolver los problemas económicos de un gobierno con trasunto socialista y un alto grado de corrupción, un sistema educativo y Academia politizada, de corte marxista y anti-capitalista, que han llevado a los puertorriqueños a niveles de pobreza, tanto educativa como cultural, sin precedentes en una jurisdicción estadounidense, lo peor, una prensa secuestrada por los “grandes intereses” que poco les importa el pueblo, pero como se han visto afectados en sus finanzas ahora piden lo que nunca estuvo en sus planes, la unidad del pueblo puertorriqueño, su riqueza educativa, cultural, política y su libertad de pensamiento para escoger su futuro político.


¡Claro que la cordura tiene que imperar!

Pero no necesariamente deben ser los legisladores del PNP, aunque su conducta es cuestionable, esos tendrán el juicio de los penepés en las próximas elecciones. Los que tienen que recobrar la cordura son los que todavía piensan que los puertorriqueños eligirán el socialismo como sistema económico y escogerán convertirse en una república como Cuba o Venezuela. Si a ellos no les funcionó, en Puerto Rico no será diferente. Por algo dijo Einstein “Locura es hacer lo mismo una y otra vez esperando obtener resultados diferentes”.


Fue su promesa de campaña, hasta ahora ha cumplido sus promesas, 
esta todavía no se cumple y estamos esperando.

¡Feliz día de la Independencia 
de los Estados Unidos!
A los puertorriqueños que llegan a la Florida, no permitan que le llamen “diáspora”, respeten al exilio cubano y sus luchas, lo que quieren los demócratas es dividirlos para ellos apoderarse de un estado que los puede llevar a ganar la presidencia, algo que sería nefasto para los Estados Unidos, darle poder a un partido que le vendió su alma a los comunistas de clóset y esa es precisamente la lucha de Donald Trump, los republicanos y el exilio cubano, esa también ha sido nuestra lucha en la isla contra el Partido Popular y los melones, esto tampoco lo admitirá la prensa boricua, ellos también tienen su agenda y es controlar la opinión pública a favor de la colonia, para que los mogules mediáticos y la burguesía no paguen contribuciones federales, sigan gozando del paraíso fiscal y la colonia contenta. 
Eso no es patriotismo.
No somos “diáspora”, ni somos el pueblo judío, ni huimos de la isla por persecución religiosa o política, somos ciudadanos estadounidenses, con una ideología capitalista y republicana, aunque muchos todavía no lo entiendan.
Such is Life!