“Now it’s time to clear the way for a series of trade
agreements that would make it easier for American companies to sell their
products in Panama, Colombia, and South Korea – while also helping the workers
whose jobs have been affected by global competition. If Americans can buy
Kias and Hyundais, I want to see folks in South Korea driving Fords and Chevys
and Chryslers. I want to see more products sold around the world stamped
with three proud words: “Made in America.”
Barack Obama
September 8, 2011
"We can create jobs in the American economy by
protecting our own manufacturing sector."
Tweet Donald Trump / Sept. 15 2011
“Es importante señalar que aunque aquí se habla mucho de la
Ley de Cabotaje, particularmente cuando nos acercamos a unas elecciones, en más
de treinta años ningún comisionado residente ha presentado un proyecto ante el
Congreso para eximir a Puerto Rico de la aplicación de la Ley Jones. En
Washington siempre ha habido y continúa existiendo una gran oposición para
modificar esta ley y viene de tres frentes: la Marina Mercante, la industria de
construcción de barcos y las organizaciones sindicales que representan a los
trabajadores de ambas. Y como único se puede vencer esa oposición es apoyando
nuestros reclamos con un estudio contundente realizado por una institución
libre de todo reproche que demuestre fehacientemente que le conviene tanto a
Puerto Rico como a los Estados Unidos eximir a la isla de las disposiciones de
la Ley Jones.
El pueblo me conoce y sabe que no acostumbro prometer lo que
no puedo cumplir. Pero les prometo que si el GAO confirma que la Ley Jones está
afectando significativamente a nuestra economía, lucharé incansablemente hasta
que se exima a Puerto Rico de la Ley de Cabotaje.”
Pedro Pierluisi
Comisionado Residente en Washington
En la campaña política se va a hablar mucho de derogar la
Ley de Cabotaje, lo promueven los que quieren la independencia para Puerto Rico
con el argumento de poder comerciar con el mundo entero y para lograr bajar las
tarifas de transporte marítimo, pero, antes de tomar una desición sobre esto es
importante saber de que se trata.
Muy propio del Comisionado Residente Pierluisi el pedir un
estudio, a juzgar por los hechos se entiende muy bien que los sindicatos que
recogen a los trabajadores se opongan, están defendiendo sus derechos como
cualquier otra unión aquí en Puerto Rico lo hace. ¿y entonces? ¿Cuál es el
beneficio para Puerto Rico?
Juzgue usted...
3 de marzo de 2012
No hay cambios a la vista a leyes de cabotaje
Advierten que es fuerte la resistencia de las empresas y el
sector sindical
Expertos de la GAO conversarán próximamente con los sectores
industriales de Puerto Rico
Por José A. Delgado
WASHINGTON – Por décadas no ha habido ambiente en el
Congreso para eximir a Puerto Rico o a otra jurisdicción con un significativo
mercado industrial de las leyes de cabotaje. Y, según varias fuentes, en estos
momentos nada ha cambiado en el legislativo federal.
En busca de eludir el efecto de esas normas, el Gobierno de
Puerto Rico ha solicitado al Ejecutivo estadounidense un relevo para el
transporte de gas natural – como parte del controvertido proyecto del Gasoducto
– y colabora con el estudio que realiza la Oficina de la Contraloría General
(GAO) para, entre otras cosas, determinar el costo actual que tienen las leyes
de cabotaje sobre la economía boricua.
“Son como una ley santa muy difícil de modificar”, indicó el
vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Industriales de Puerto Rico,
William Riefkohl, quien tuvo esta semana reuniones en el Congreso.
Las leyes de cabotaje obligan desde 1920 a transportar la
carga marítima entre Puerto Rico y Estados Unidos en barcos fabricados en este
país, que sean propiedad y de bandera estadounidenses.
Un estudio de 1999 de la Comisión de Comercio Internacional
de EE.UU. ha calculado que sin las normas de cabotaje los costos de transporte
de productos descenderían un 22%.
En Puerto Rico, donde se estima que el impacto negativo
puede alcanzar los cientos de millones de dólares, hay una excepción para la
industria de los cruceros turísticos y se han otorgado relevos para el
transporte de madera.
Las exenciones plenas que existen son para territorio no
“industriales” - como Islas Vírgenes, Samoa y las Islas Marianas del Norte -,
sostuvo Riefkohl.
En Guam no está vigente una de las disposiciones más
criticadas, la exigencia de que el barco sea fabricado en Estados Unidos.
Hace unos días, el candidato del Partido Popular Democrático
(PPD) a comisionado residente en Washington, Rafael Cox Alomar, afirmó que una
de sus principales prioridades en el Congreso será terminar con la vigencia de
“las leyes de cabotaje”.
Causa de la resistencia
El panorama en Washington, sin embargo, ha demostrado que
derogar esas normas, que forman parte de la Ley Jones, es un esfuerzo que no es
tan simple como lanzar un eslogan de campaña.
Como en el pasado, la resistencia de las empresas y el
sector sindical, preocupados por sus puestos de trabajo en la industria de
carga marítima en Estados Unidos, es aún muy fuerte, dijo el comisionado
residente en Washington, Pedro Pierluisi.
Pierluisi fue quien solicitó el estudio de la GAO.
Hace unos días, volvió a tratar el tema con el portavoz de
la minoría demócrata en el Comité de Transportación de la Cámara de
Representantes, Nick Rahall (West Virginia). Pero, según Pierluisi, se le
reafirmó que en este momento ese tipo de iniciativa “no va a prosperar”.
En la pasada sesión legislativa, el senador republicano John
McCain (Arizona), pasado candidato republicano a la presidencia de Estados
Unidos, intentó derogar las leyes de cabotaje, a través de su proyecto de ley
3525. La medida tuvo solo un coauspiciador y nunca ni siquiera fue discutida en
una audiencia pública.
Aunque Cox Alomar sostiene que “basta ya de estudios”, a la
Asociación de Industriales le parece importante la evaluación que hace la GAO.
Pierluisi, mientras, indicó que la GAO ha examinado ya “el
costo de las embarcaciones que nos sirven” y analizará el mercado de los
productos que más se transportan entre Puerto Rico y Estados Unidos.
Expertos de la GAO se han entrevistado con las empresas
dedicadas al transporte de carga marítima y conversarán próximamente con los
sectores industriales de Puerto Rico.
La idea, explicó Pierluisi, es que el estudio se termine
antes de que cierre 2012 y que siente las bases para alguna legislación que
tenga posibilidades de éxito en el Congreso a partir de 2013, quizá dirigida a
lograr una exención limitada.
Para Cox Alomar, sin embargo, Pierluisi y el gobernador Luis
Fortuño “botaron demasiado capital político” con el proyecto de status 2499,
que nunca avanzó en el Senado, en vez de dedicar más tiempo a este asunto. “Si
se va unido, se pueden crear alianzas importantes”, dijo Cox Alomar.
Riefkohl recordó, sin embargo, que por lo menos desde la
década de 1980 hay consenso en Puerto Rico de que las leyes de cabotaje son un
peso negativo para la economía puertorriqueña.
Pero, Riefkohl no descarta que sea posible “lograr una
exención limitada” aunque sea temporal y que el estudio de la GAO sea la carta
de presentación que reviva la conversación con el Congreso.
Me parece que si Rafael Cox Alomar pretende derogar esta ley
para Puerto Rico es un mensaje claro que irá a Washington a buscar la
independencia de Puerto Rico, esta sería la punta del iceberg para lograrlo
porque entiendo que de la única manera que se logra es separándonos de los
Estados Unidos de América.
Incluso pienso que si se actúa en detrimento de los
sindicatos esto tiene un costo político, ¿qué pesa más en el Congreso? ¿Los
votos de estos sindicatos o el beneficio que pueda tener para Puerto Rico? Obviamente los votos de los sindicatos y
Cox Alomar lo sabe.
La Marina Mercante de los Estados Unidos de América a mi
entender es un cuerpo poderoso y respetable, fuente de empleos para muchos
americanos, en una época de crisis para los Estados Unidos, ¿es pertinente
trastocarla? No creo.
Somos una isla y todos nuestros suministros llegan en barco,
pero a la misma vez crea empleos, ¿debemos cambiar esto para que se afecten los
empleos que esta actividad pueda proveer a los ciudadanos americanos de aquí y
los de allá? ¿A quién conviene esto a los consumidores o a los "grandes intereses"? Creo que estas son las preguntas que se deben hacer?
En mi opinión, los comerciantes y dueños de negocios que
importan y exportan quieren abaratar costos para ellos obtener más ganancias,
disfrazando el asunto como que quieren bajar los precios de transporte y la
soga corta siempre por lo más fino, los trabajadores, pero a mí me preocupa esto
porque ya hemos visto como esta reseción la crearon los millonarios de Wall
Street con la falta de regulación. No siempre las regulaciones son malas.
Por falta de protección a la industria nativa hoy en Puerto
Rico se importa todo lo que se consume porque es más barato, no tenemos empleos
suficientes por esta misma razón y no exportamos porque no hay empresas
puertorriqueñas para eso, entonces ¿Es necesario esto?
Ya estoy cansada de ver como en Puerto Rico se auspicia todo lo que viene de afuera porque el orgullo boricua y el patriotismo llega hasta lo que consumimos. Desde la ropa, muebles, autos y artículos de promoción todo es hecho en China, India y Japón. Vamos a empezar a enfocarnos como país productor, exportador y por consiguiente con nuestra marina mercante. Además es importante también empezar a pensar en exportar nuestro arte, artesanía y la cultura porque esto también es producto de exportación.
Creo que debemos empezar a mirar esto con otro enfoque
porque ¿hasta donde vamos a llegar para beneficiar a otros y no a nosostros
mismos? ¿A quién vamos a defender? Obviamente, al pueblo trabajador que
necesita empleos, para salir de la pobreza, para tener una vida digna estimulada
por un comercio saludable, nativo y americano.
Si queremos pertenecer a los Estados Unidos tenemos que
pensar que somos parte de su equipo.
¿No creen? y esto no es pitiyanquismo.
Creo en el “Made in USA”, creo en el “Made in Puerto Rico”,
ya está bueno del “Made in China”, que el mundo empiece también a auspiciarnos
¿De que lado están?
Such is Life!