viernes, 8 de julio de 2011

La politización de la cultura puertorriqueña

Miguel Pou
Sin Título: "Casita en el Campo"
24" x 16"
óleo sobre lienzo

La política, el estatus y la cultura no mezclan

“He tratado de explicar que porque creas en la anexión de Puerto Rico no debes ser enemigo de la cultura puertorriqueña. En el 98, Estados Unidos quería hacer en Puerto Rico lo que estaba haciendo con los indios: imponer el idioma y la cultura a la fuerza. Pero hoy vemos que estados como Nuevo México, Texas o Louisiana preservan su particularidad. No se entiende entonces que aquí haya alcaldes que pongan lo del “Police Department” o lo de “Downtown” o rótulos en inglés. La herencia puertorriqueña no debe ser atacada por los puertorriqueños. Estados Unidos me ha dado muchísimos premios y todos por fortalecer la cultura puertorriqueña.”
Ricardo Alegría

Podemos diferir del pensamiento político de Don Ricardo Alegría, pero en algo estamos deacuerdo, ser orgullosos de nuestra cultura no interfiere con nuestro deseo de ser parte de los Estados Unidos de América como el Estado 51.

A los estadistas nos han atacado por ser pitiyanquis y asimilados vendepatrias por querer la estadidad para Puerto Rico y es importante analizar esta posición de los enemigos que se abrazan de la defensa de la cultura para su discurso político.

Hoy que Don Ricardo se fue son muchos lo que hablan y opinan pero son pocos los que han estado dispuestos a arremangarse la camisa para lograr que el arte puertorriqueño trascienda más allá de nuestra playas y ayudar al artista puertorriqueño a no morirse de hambre.

Quiero hablar de la distorsión del concepto de la cultura porque en Puerto Rico hay muchos que su mentalidad política les ha nublado el entendimiento de lo que verdaderamente significa ser puertorriqueño.

“Spanish Only”
Criticamos mucho al americano cuando defiende el "English Only" y aquí pasó lo mismo pero alrevés. Sobre el inglés me parece que aquí hubo una percepción muy pequeña sobre el aprender un segundo idioma, se interpretó que esto era atentar contra la puertorriqueñidad, ese fue el discurso independentista y popular, a la larga se les vió la costura separatista. Aprender un segundo idioma no sólo es bueno para el desarrollo profesional del individuo también es parte de la cultura. Hoy todos los países del mundo tienen un segundo idioma que es el inglés, es imprescindible un idioma universal para poder comunicarnos unos a otros.

Esto fue una gran traición para la gente humilde que estudia en las escuelas públicas, pues le quitó a esas nuevas generaciones el poder expresarse en un segundo idioma  eficientemente mientras esos mismos “defensores” de la cultura enviaban a sus hijos a colegios privados y universidades “extranjeras” para que se desenvolvieran bien en el inglés. Las uniones de los maestros propiciaron esta atrocidad, algo imperdonable para los que se dicen ser paladines del conocimiento y sucumbieron a las bajas pasiones de la politiquería barata.

Hacerle creer a los puertorriqueños que el gringo vino a acabar con nuestra puertorriqueñidad a mi entender fue un grave error. Hoy la historia les golpea el rostro, en Estados Unidos continentales hay más puertorriqueños que en Puerto Rico y han atesorado su cultura, sus costumbres y hablan español. Puertorriqueños de 2da, 3ra y 4ta generación no han sucumbido a la asimilación total. ¿Qué les parece?

La defensa del idioma español como arma política contra los estadistas es mezquino. La realidad es que si nosotros creemos en la unión, tenemos que saber comunicarnos con ellos y eso no es condenable, todo lo contrario, es positivo para tener una población a la altura de lo que el mundo profesional exige. Es sumamente importante que los puertorriqueños dominen el inglés y el español, oral y escrito. Lamentablemente tengo que decir que hoy son muchos los que no saben ni leer ni escribir apropiadamente ninguno de los dos idiomas.

Pretender que Puerto Rico no trascienda fuera de sus costas con una buena educación y sentido de cultura es ser enemigo del progreso porque aislar una población del conocimiento es caraterístico de gobiernos totalitarios.

Cultura vs. Vendepatrias
La izquierda se autoproclamó custodio del patrimonio cultural diciendo que ser independentista era sinónimo de ser puertorriqueño, se acuartelaron en las agencias de la cultura cerrándole el paso a otros puertorriqueños con ideas políticas diferentes.

Su discurso político fue sobre la asimilación y la falsa apreciación de que los estadistas se abochornaban de ser puertorriqueños. Cuando Luis Ferré habló sobre el concepto de “Estadidad Jíbara” llovieron las críticas y de disparatero pa’bajo que no dijeron. Hoy sabemos que la Estadidad es realizable con nuestra cultura y español.

Don Luis sabía lo que significaba ser un puertorriqueño estadista porque lo vivió, conocía de primera mano que los “americanos” respetan las diferentes culturas porque los Estados Unidos se compone de inmigrantes de todas partes del mundo y el gobierno federal no interviene en eso. Pero a los independentistas y populares ese mensaje no le convenía, diabolizar a los estadistas era más conveniente para sus propósitos políticos.

Hoy, sabemos porque lo hemos visto personalmente que en Estados Unidos se estudia en las escuelas las diferentes culturas, se celebran las fiestas patrias y lo más importante en un ambiente de respeto hacia los demás.

No podemos permitir que los independentistas-separatistas se abroguen la defensa de la cultura, todo puertorriqueño estadista vive orgulloso de ser puertorriqueño y de su cultura, esto no es exclusivo de la izquierda. A ellos hay que decirle “tan puertorriqueños como Don Ricardo Alegría”

El Mercado del Arte
Luego de la muerte de Don Ricardo, luego de escuchar a tantos defensores del patrimonio cultural, me gustaría saber si entre tantos paladines de la cultura habrá alguien disponible para llenar los zapatos de este gran puertorriqueño. En Puerto Rico se habla mucho, hay muchos que se pintan más puertorriqueños que nadie pero a la hora de la verdad, no hay quien trabaje para lograr que los artistas y artesanos de Puerto Rico tengan una proyección internacional como industria nativa para exportación.

La realidad es que el mercado del arte y artesanías en Puerto Rico está en el piso. Los artistas no pueden vivir de su trabajo artístico porque no es suficiente para sus necesidades básicas. La hipocrecía de muchos insulta la inteligencia de otros. Se culpa a los gobiernos PNP’s de ser enemigos de la cultura pero la realidad es que los que dirigen las agencias de la cultura no tienen un plan estratégico sobre el mercado del arte y si lo tienen no lo dan a conocer, ni tan siquiera un “newsletter” preparan y el website está obsoleto.

Dicho por Don Walter Murray Chiesa los gobernadores que más han apoyado la cultura han sido Carlos Romero Barceló y Rafael Hernández Colón. Con Romero se consiguió la ayuda a los artesanos con equipo para mejorar sus trabajos artesanales. Don Luis A. Ferré fundó el Museo de Arte de Ponce. Hoy tenemos un Museo de Arte de Puerto Rico gracias a Pedro Rosselló González. Quién más ha ayudado a los artesanos dándole un espacio en sus centros comerciales es el Sr. Jaime Fonalledas, a quien tanto han atacado por representar los grandes intereses y a cada rato los socialistas izquierdosos le quieren cerrar el centro comercial Plaza Las Américas. Así es que no es cierto que los estadistas le han dado la espalda a la cultura. Hay muchas cosas que han hecho los estadistas por el arte y la cultura.

En mi opinión el Instituto de Cultura Puertorriqueña se ha enfocado en el pasado y no tiene “ni perra idea” de que va a pasar en el futuro con los artistas y artesanos puertorriqueños. Ni tan siquiera hay un registro de información sobre todos los artesanos y artistas puertorriqueños para la historia.

El gobierno de Luis Fortuño tiene proyectos de infraestructura para el distrito de las artes en Santurce, aportaciones económicas, un museo de artesanía en San Juan que promueve Santini, eso está muy bien, pero y los demás empleados y defensores de la cultura ¿dónde están? Son pocos los que hacen con las pocas herramientas y oportunidades que tienen. Esto es responsabilidad de todos y ya es hora que el Instituto de Cultura, Fomento y la Compañía de Turismo haga más por el mercado del arte puertorriqueño.

Nunca será demasiado lo que se haga por el arte
y la cultura puertorriqueña y esto abarca
muchas manifestaciones artísticas.
Yo exijo que el que no esté dispuesto
a trabajar incansablemente para promover
el mercado del arte que se quite porque
no es suficiente hablar, hay que actuar.

“Lamentémonos por los que nos dejan sin Patria y sin cultura y sin identidad. Esos que con su poder político censuraron, condenaron y persiguieron a este Viejo Sabio... a este inmenso gigante, que como Betances, como Tapia y Albizu, nos enseñó a ser”
Roberto Ramos Perea
Dramaturgo Puertorriqueño
Medalla de la Fundación Alegría
La Rabia del Viejo Sabio...
El Nuevo Día
8 de julio de 2011

A Roberto Ramos Perea le pregunto ¿Qué aportación cultural a hecho por este País aparte de sus comentarios y escritos llenos de odio hacia otros puertorriqueños que no piensan igual que usted?

Este “dramaturgo puertorriqueño” no pierde la oportunidad de despotricar contra los estadistas por el único “pecado” de creer en la Estadidad Jíbara y no solamente eso, miente sin que le de vergüenza atacando sin fundamentos a sus compatriotas, esa confusión mental que tiene con una mezcla de narcisismo es lo más cercano a la locura de Albizu Campos. Me imagino que para él esto será un halago.

Si tanto ama la cultura puertorriqueña le sugiero, así como a otros que se autoproclaman defensores de la cultura, que se ofrezcan a ser promotor artesanal y así ayudar a los artesanos a tener ayudas y mejores condiciones de vida.

A representar a los artistas plásticos haciendo exposiciones en y fuera de Puerto Rico y a la vez que la obra artística puertorriqueña llegue a cotizar en Sothebys y otras casas de subastas varios ceros a la derecha.

Que el arte puertorriqueño y sus artistas sean reconocidos en todo el mundo.

A crear un mercado de arte donde haya una galería en cada pueblo de la isla y que los puertorriqueños en vez de ir a Marshalls a comprar cuadros vayan a esas galería y compren arte puertorriqueño.

A lograr que Puerto Rico se convierta en un destino de turismo de arte

A que el mercado de diseño de muebles y artes decorativas puertorriqueñas sea reconocido en las tendencias de decoración de interiores y aparezca en revistas especializadas.

Que Puerto Rico se habra a una industria de instrumentos musicales a nivel mundial.

Que Puerto Rico pueda aspirar a tener un “Broadway” boricua donde vengan turistas de todas partes del mundo a ver las obras de teatro y musicales.

Empresas privadas como el Banco Popular han usado el tema de la cultura para sus anuncios comerciales, hacen más que las agencias del gobierno que tienen el deber de mantener informados sobre que se está logrando para preservar el patrimonio cultural y la promoción de la cultura y el arte puertorriqueño. ¿Qué se está haciendo a favor de los artistas puertorriqueños?

Son muchas las cosas que se pueden hacer por la cultura puertorriqueña y me resulta asqueante que la izquierda de este País se autoproclamen defensores del Patrimonio Cultural, no aupician lo que sus compatriotas de otras ideologías producen, no hacen nada por los representantes del arte puertorriqueño, se enorgullecen de cantar Verde Luz después de varias copas de vino tinto y piensan que con eso ya cumplieron con la cultura y el País. Such is Life!