martes, 3 de mayo de 2011

Juan Pablo II vs. Osama Bin Laden y la lucha entre el bien y el mal


Paz o guerra...
1ro de marzo de 2011

No hay duda que la noticia de la muerte de Bin Laden ha sido bienvenida por muchos países y a otros por el contrario, no lo han tomado con tanta alegría. Obviamente para los enemigos de Estados Unidos, esta acción de parte de Barack Obama los ha tomado por sorpresa. Mientras Estados Unidos esté bajo la bota del enemigo todo está bien pero si logra apuntarse una no es agradable. Such is life!

El Nuevo Día - VENEZUELA
El gobierno venezolano condenó las celebraciones que se dieron tras la muerte de Osama Bin Laden en un operativo militar de Estados Unidos, mientras algunos gobiernos latinoamericanos felicitaron a Washington por acabar con la vida del cerebro detrás de los atentados del 11 de septiembre de 2001. 
El vicepresidente venezolano Elías Jaua dijo a la televisora estatal que "no deja de sorprender cómo se ha naturalizado el crimen y el asesinato, y cómo se celebra".

Recuerdo cuando ocurrió lo del 11 de septiembre cómo los árabes que odiaban a Estados Unidos celebraban porque Al Qaeda le había arrebatado la vida a cerca de 3,000 personas inocentes y los socialistas en Puerto Rico decían que Estados Unidos se lo había buscado. Me pregunto ¿Cómo debemos analizar que algunas personas se alegren de que muera gente inocente sin embargo no se alegran de que muera un terrorista? ¿De qué lado están?

En mi opinión rendirle pleitecía a un terrorista y decir que se le debió arrestar en vez de matarlo es un comentario cuestionable. Arriesgar la vida de militares en una operación sumamente peligrosa no es una buena decisión de parte de un presidente. La decisión fue la correcta, los terroristas no merecen piedad y Bin Laden era un terrorista sanguinario, responsable no solamente del derribo de las Torres Gemelas también lo fue del ataque el 11 de marzo en Madrid, en Londres, a Embajadas y al barco USS Cole entre otros. ¡Prohibido olvidar!

Los grupos terroristas que se manejan en la clandestinidad son cobardes, ver personas que se inmolan inducidos por estos delincuentes en un acto de barbarie y esto tiene que terminar de una vez y por todas. No hay derecho a tener al mundo de rehén porque unos locos quieren crear una guerra "santa". Yo personalmente deseo que Bin Laden se esté quemando en el fuego del infierno y que bueno que lo mataron.

No puedo darle el beneficio de la duda a los revolucionarios que hacen la guerra sin ningún bien para la población, sólo buscan su propio bienestar, esto ha pasado con Fidel y Raúl Castro, Hugo Chavez, Gaddafi, el Talibán y otros. Como dice el americano No Mercy! ¿Por qué? Porque a Al-Qaeda no le tembló el pulso cuando secuestraron y asesinaron al periodista Daniel Pearl. No quiero hablar de los dictadores anteriormente citados pero sí menciono paredón de fusilamiento, 18 muertos en marcha del 11 de abril en Venezuela, guerra en Libia y persecución en Afganistán.

Es difícil cuando se es cristiano pensar así pero a esta gente no se le puede combatir con “peace and love” y una florecita, a pesar de que grupos han logrado esto en otros países contra gobiernos injustos, pero la lucha contra el terrorismo es diferente, Jesúcristo murió por nosotros, dio su vida para limpiar nuestros pecados, esto tampoco lo podemos olvidar, pero permitir que gente malvada se salga con la suya no es justo.


Por otro lado, la beatificación de Juan Pablo II, un católico que luchó contra el comunismo como ningún religioso lo ha hecho en la historia. Gracias a la intercesión de este querido Papa cayó el Muro de Berlín, Rusia abandonó el comunismo y Lech Walessa ganó la presidencia de Polonia con su movimiento Solidaridad. Fue a Cuba y pidió que Cuba se abriera al mundo y el mundo se abriera a Cuba, cuando visitó la Nicaragua sandinista, fue abucheado por los aliados de Ortega, no hay duda que fue un acto infame contra un hombre bueno que siempre proclamó y luchó por la paz.

La historia nos da a conocer muchos hechos para darnos cuenta de quienes son los que pertenecen al eje del mal y quienes buscan el bien y la paz de los pueblos. Los cristianos tenemos que estar muy atentos a esto. Estados Unidos es un país de paz, su gobierno siempre ha sido cristiano, “In God we Trust” es su consigna. Por más que digan que es la policía del mundo, que le hace la guerra a varios países y que ha participado en guerras mundiales, la realidad es que siempre ha sido con la intención de buscar la paz y el bienestar del mundo, las cosas como son.

Con la muerte de Osama Bin Laden no termina la lucha contra el terrorismo de Al-Qaeda, muchos analistas lo han dicho en entrevistas. Es hora de rezar, de doblar rodillas y pedirle a nuestro Dios que nos libre de toda amenaza. Tambien bendecir esas tropas militares del mundo que nos protegen para que no suframos de injusticias y la esclavitud de ideologías socialistas-comunistas. "Freedom is not free"

Para la Iglesia darle la Santidad a Juan Pablo II, tiene que haber milagros luego de la fecha de su beatificación. ¿Por qué no le pedimos a Juan Pablo II que interceda por la paz mundial? él en vida luchó por eso desde el Vaticano. Estamos viendo a través de la noticias como el mundo esta en conflicto, tenemos que pedir por el bienestar de las víctimas de los dictadores, de los terroristas, de los violadores de mujeres, por el bienestar y felicidad de todos los niños del mundo, debemos pedirle con fe que interceda porque el eje del mal sea derrotado para el bien de la humanidad.

A continuación la oración para implorar favores por intercesión de este Siervo de Dios.

Oh Trinidad Santa,
Te damos gracias por haber concedido a la Iglesia al Papa Juan Pablo II  
y porque en él has reflejado la ternura de Tu paternidad, 
la gloria de la cruz de Cristo y el esplendor del Espíritu de amor. 
Él, confiando totalmente en tu infinita misericordia y 
en la maternal intercesión de María, 
nos ha mostrado una imagen viva de Jesús Buen Pastor, 
indicándonos la santidad, alto grado de la vida cristiana ordinaria, 
como camino para alcanzar la comunión eterna Contigo.
Concédenos, por su intercesión, y si es Tu voluntad, 
el favor que imploramos, 
con la esperanza de que sea pronto incluido en el número de tus santos.
Amén.

Oremos junto a nuestro Sumo Pontífice para evitar derramamiento inútil de sangre!

Dios de infinita misericordia y bondad,

con corazón agradecido te invocamos hoy
 en esta tierra 
que en otros tiempos recorrió San Pablo.
Proclamó a las naciones la verdad de que 
en Cristo
 Dios reconcilió al mundo consigo (cf. 2 Co 5, 19).
Que tu voz resuene en el corazón 
de todos los hombres y mujeres,

cuando los llames a seguir 
el camino de reconciliación y paz,

y a ser misericordiosos como tú.
Señor, tú diriges palabras de paz a tu pueblo

y a todos los que se convierten a ti
 de corazón (cf. Sal 85, 9).
Te pedimos por los pueblos de Oriente Próximo.
Ayúdales a derribar las barreras 
de la hostilidad y de la división

y a construir juntos un mundo de justicia y solidaridad.
Señor, tú creas cielos nuevos
 y una tierra nueva (cf. Is 65, 17).
Te encomendamos a los jóvenes de estas tierras.
En su corazón aspiran a un futuro más luminoso;

fortalece su decisión de ser hombres y mujeres de paz

y heraldos de una nueva esperanza para sus pueblos.
Padre, tú haces germinar
la justicia en la tierra (cf. Is 45, 8).
Te pedimos por las autoridades civiles de esta región,

para que se esfuercen por satisfacer
las justas aspiraciones de sus pueblos

y eduquen a los jóvenes en la justicia y en la paz.
Impúlsalos a trabajar generosamente por el bien común

y a respetar la dignidad inalienable de toda persona
y los derechos fundamentales que derivan 
de la imagen y 
semejanza del Creador 
impresa en todo ser humano.
Te pedimos de modo especial
por las autoridades de esta noble tierra de Siria.
Concédeles sabiduría, clarividencia y perseverancia;

no permitas que se desanimen en su ardua tarea
de construir la paz duradera,
 que anhelan todos los pueblos.
Padre celestial,
 en este lugar donde se produjo
la conversión del apóstol San Pablo,
te pedimos por todos los que creen 
en el evangelio de Jesucristo.
Guía sus pasos en la verdad y en el amor.
Haz que sean uno,
 como tú eres uno con el Hijo y el Espíritu Santo.
Que testimonien la paz 
que supera todo conocimiento (cf. Flp 4, 7)

y la luz que triunfa sobre las tinieblas de la hostilidad,

del pecado y de la muerte.
Señor del cielo y de la tierra,
 Creador de la única familia humana,

te pedimos por los seguidores de todas las religiones.
Que busquen tu voluntad
 en la oración y en la pureza del corazón,

y te adoren y glorifiquen tu santo nombre.
Ayúdales a encontrar en ti

la fuerza para superar el miedo y la desconfianza,

para que crezca la amistad y vivan juntos en armonía.
Padre misericordioso,
 que todos los creyentes

encuentren la valentía de perdonarse unos a otros,

a fin de que se curen las heridas del pasado

y no sean un pretexto
para nuevos sufrimientos en el presente.
Concédenos que esto se realice
 sobre todo en Tierra Santa,

esta tierra que bendijiste 
con tantos signos de tu Providencia

y donde te revelaste como Dios de amor.
A la Madre de Jesús,
 la bienaventurada siempre Virgen María,

le encomendamos 
a los hombres y a las mujeres

que viven en la tierra donde vivió Jesús.
Que, al seguir su ejemplo, escuchen la palabra de Dios

y tengan respeto y compasión por los demás,

especialmente por los que son diversos de ellos.
Que, con un solo corazón y una sola mente,

trabajen para que el mundo sea
 una verdadera casa para todos sus pueblos.

¡Paz! ¡Paz! ¡Paz!
Amén.


¡La fe mueve montañas, pidamos con fe por la paz del mundo!