¿Desafío Socialista?
La Democracia y la Justicia se fueron al campo un día pero
pudo más el interés socialista que el amor a la justicia y la democracia que te
tenía...
Así, una minoría de cuatro jueces no sólo desestimaron una
demanda donde ni siquiera se había emplazado a la totalidad de los demandados,
sino que además sancionó a los abogados promoventes con una multa de $10,000
por entender que habían sido temerarios al llevar su caso ante los foros
judiciales. Sin duda, esto es un golpe a la democracia y al poder fiscalizador
de la ciudadanía. Una sanción de esa magnitud ¿no tiene acaso un enorme poder
disuasivo? ¿No limita la participación ciudadana en su dimensión de contralor
en cuanto a los actos del Ejecutivo? ¿Implica que una vez se ganan las
elecciones la ciudadanía no tiene poder para cuestionar los actos de los
funcionarios electos? Parece ser que la visión de democracia de nuestro
Tribunal se reduce al ejercicio electoral una vez cada cuatro años.
Más allá de los méritos del caso, es importante destacar el
mensaje de que parece enviar el Tribunal Supremo a los abogados con la sanción
confiscatoria impuesta. Lamentablemente, la triste decisión de una minoría
tendrá efectos devastadores a la hora de litigar casos de alto interés público.
Seguimos en el escarpado camino del achicamiento de nuestra democracia.
MARIANA IRIARTE
Triste día para la democracia
11 de octubre de 2013
El Nuevo Día
¿Triste día para nuestra democracia boricua?
¿Quién es
Mariana Iriarte Mastronardo?
Nació en Caseros, Buenos Aires, Argentina. Estudió Ciencia
Política y Derecho en la Universidad de Buenos Aires. Tiene un B.A. en Artes
con concentración en Ciencia Política de la Universidad de Puerto Rico, Recinto
Río Piedras y un Juris Doctor de la misma institución. Actualmente, realiza una
Maestría en Género, Sociedad y Políticas de la Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales. Trabajó en el Tribunal Supremo de Puerto Rico como Oficial
Jurídica de la Hon. Anabelle Rodríguez Rodríguez; actualmente se desempeña como
asesora legal del Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores, Local 1996 SEIU.
Además, es colaboradora de los periódicos El Nuevo Día y Claridad donde escribe
sobre asuntos relacionados al género, el Derecho y el poder. Sus intereses
principales son la Teoría Política Contemporanea, la Teoría del Derecho, los
Estudios Críticos del Derecho, Género y Políticas del Cuerpo, Feminismos,
Ciudadanía, Democracia, entre otros.
Hay que saber quienes son para saber por dónde vienen...
Me parece que la socialista Mariana Iriarte es la menos
indicada para cuestionar las desiciones de un Tribunal Supremo puertorriqueño
cuando son muchos los países socialistas latinoamericanos que violan derechos
humanos, civiles y la democracia.
¿Por qué no empieza a admitir la corrupción judicial y tratar de enmendar la justicia y la democracia en América Latina primero?
¿Qué hace en Puerto Rico?
¿Pretenediendo que las cosas sean como en la Patria Grande?
Aunque en América Latina y el Caribe prevalece la democracia
como sistema, la justicia en la región sigue siendo un estado de ánimo, más que
una garantía imprescindible para salvaguardar el estado de derecho.
Los Poderes Judiciales son aún débiles; en muchos casos,
dependientes del Ejecutivo, y en los peores, de los Gobiernos de turno, de los
cuarteles, de los partidos. “La justicia es lenta, depende de los momentos en
la historia política de un país y de las posibilidades”, afirma Reed Brody,
consejero jurídico de Human Rights Watch.
La deuda de justicia de América Latina
Decenas de casos de violaciones a los derechos humanos
ocurridos en el pasado de reciente de América Latina y el Caribe esperan por
ser juzgados y miles de víctimas, esperan justicia
Hello Mariana! Are you there?
¿Qué tiene que decir Mariana Iriarte del caso de la Jueza
Afiuni en Venezuela?
Obviamente a Mariana Iriarte le molesta que la desición sea
contraria a sus deseos porque esos jueces del Tribunal Supremo son “de derecha”
nombrados por un estadista republicano, no porque tengan la razón o impartan justicia. Para
los socialistas la razón siempre la tendrán ellos sin importar los derechos de
los demás a tomar desiciones en base a la ley y la justicia.
Ningún socialista en Puerto Rico ha salido a defender a la
Jueza Afiuni en un claro caso de abuso de poder de un presidente dictador — y
que bueno que se murió, sí, los malos no merecen un espacio en este planeta
aunque los chavistas lo pretendan canonizar, pero todavía queda “su hijo” dando
candela — y por eso es que no
tienen la más mínima credibilidad.
Por otro lado...
“Esto no se trata de un juez o un exjuez, no se trata de un
individuo, se trata de un sistema de derecho más justo, más equitativo que
comunique más igualdad a favor del ciudadano”
Representante Charlie Hernández
Yeah right!
¿Y el derecho del que quiera contratar al Lcdo. Andreu
García para su defensa dónde queda?
¿Por qué recurren a este argumento trillado de leguleyo para
tratar de convencer a la gente de que están actuando en defensa del pueblo si a
leguas se ve que es mentira?
He criticado la Justicia Roja boricua muchas veces, no soy
abogada ni simpatizo con los abogados, he tenido experiencias poco agradables
con los abogados, pero eso no me ciega para pensar que Charlie Hernández está
equivocado en pretender coartarle el derecho al ex-juez Andreu García a
practicar su profesión a través de una legislación que tiene visos dictatoriales,
eso en cualquier liga es intromisión indebida a la rama judicial y un precedente nefasto en
cualquier democracia.
La Justicia Roja boricua lo que necesita es una
auto-evaluación exhaustiva e investigación sobre el comportamiento cuestionable
de los jueces, abogados y fiscales para resolver casos por debajo de la mesa y
no pretender limitar al exjuez Andreu-García como abogado. En eso es que se
deberían de enfocar porque flaco servicio le hacen al pueblo si no permiten que
la justicia sea ciega y la democracia brille.
Si esto pasa entre populares, si Mariana Iriarte está triste porque no desea que hayan jueces estadistas en el Sistema Judicial y cuestiona sus desiciones justas, imaginemos si esto fuera una república socialista de la Patria Grande Bolivariana.
¿Patria o muerte?
Such is Life!