En Estados Unidos, la influencia comunista en la justicia social y el liberalismo moderno se ha apropiado de los conceptos de libertad, progreso y tolerancia, alterando así el estado moral de la sociedad y, con ello, las bases morales de la ley. Utilizar estas causas para rechazar y destruir los cimientos morales y religiosos es algo que afecta qué tipos de leyes pueden ser promulgadas y cómo serán interpretadas por los jueces...
Antes de que una nueva ley entre en vigor, debe atravesar una serie de pasos, incluyendo el borrador, el respaldo político, fallos de la corte sobre su legalidad o su implementación por agentes del orden público. Durante este proceso, personas o grupos del ámbito académico, mediático, legal e incluso de la industria del entretenimiento ejercen su influencia sobre la legislación y la promulgación de la ley.
El espectro comunista encontró a sus representantes a lo largo y a lo ancho de la sociedad con el fin de controlar el proceso legislativo. Varios lobbies políticos hicieron su mejor esfuerzo por llenar a las agencias gubernamentales de izquierdistas. En el sector judicial, se convirtieron en jueces, fiscales y otros funcionarios responsables de las riendas de la justicia.
Un presidente progresista hará todo lo que esté a su alcance para asignar jueces con ideas afines en la Corte Suprema, donde usarán su influencia para desvirtuar la ley, o usará sus poderes ejecutivos para evadir el sistema legal. Históricamente, los presidentes progresistas de EE. UU. tendieron a otorgar más indultos. En un gobierno reciente, el presidente redujo las sentencias de 1385 convictos e indultó a un total de 212 personas, el mayor número desde la administración del presidente Harry Truman. En uno de sus actos finales antes de dejar la Casa Blanca, el presidente redujo la sentencia de 209 personas e indultó a otras 64. La mayoría de quienes fueron indultados eran criminales no violentos condenados por delitos relacionados al consumo de drogas. Una excepción fue un hombre acusado y encontrado culpable de filtrar 700.000 documentos militares clasificados. Gracias a la clemencia del presidente, su sentencia fue reducida y solo cumplio cuatro de los treinta y cinco años de condena.
Capítulo 10: Utilizar la ley para hacer el mal
Traducción en partes del libro: “Cómo el espectro del comunismo rige nuestro mundo”
Por La Gran Época07/09/2018
https://www.lagranepoca.com/news/365158-capitulo-10-utilizar-la-ley-para-hacer-el-mal.html
¿Qué les parece?
Todos sabemos que de quien se habla es de Barack Obama y que uno de esos presos fue el terrorista Oscar López. Además, de las protestas inmerecidas en las vistas de nombramiento del juez de la Corte Suprema, Brett Kavanaugh. Los demócratas se han convertido en una oposición traidora de los mejores intereses de los ciudadanos estadounidenses.
Really?
La amenaza del fascismo en los Estados Unidos es real, por eso el ataque virulento contra Donald Trump.
Lo insólito es el ataque de la prensa, obviamente también la "liberal media" ha sido invadida por comunistas, los vemos todos los días escribiendo columnas de opinión, ya sea en editoriales, anónimos y otros son más audaces y lo firman.
Por eso vimos ayer que END publica un editorial y una columna de opinión de Benjamín Torres Gotay despotricando todo su odio contra el presidente, en una columna titulada "La fiebre anaranjada", basados en las acusaciones falsas de la trama rusa, planeada por los Clinton y Obama, quienes han sido muy beneficiados por el hijo de la gran Putin, pero ahora le quieren endilgar el issue a Trump, eso será hasta que baje una investigación de Justicia, para saber realmente si Muller dijo la verdad sobre su investigación.
The Deep State and the Left, and their vehicle, the Fake News Media, are going Crazy - & they don’t know what to do. The Economy is booming like never before, Jobs are at Historic Highs, soon TWO Supreme Court Justices & maybe Declassification to find Additional Corruption. Wow!
Donald J. Trump @realDonaldTrump
4:19 AM - 6 Sep 2018
¡Qué lo haga! y mientras más pronto, mejor.
De cara a las elecciones de medio término vemos un bombardeo de anuncios dirigidos a los votantes hispanos con el tema de la inmigración. Cuomo nos dice que la persecución de ICE a los indocumentados no es los Estados Unidos que quieren los demócratas, y uno se tiene que preguntar ¿a qué ciudadanos defiende él? ¿A los que viven legalmente o a los que entran al país ilegalmente con sabe Dios qué propósito?
En el estado de Nueva York hay dos candidatos, no se sabe cual de los dos es más de la izquierda, si el incumbente, que hace una campaña de propaganda de izquierda o la Sra. Dixon, que la está apoyando Carmen Yulín, ambas, comunistas de closet, como yo les llamo, si los niuyorquinos no despiertan, pronto veremos la quiebra económica de ese estado.
El "underdogma" es el tema en esta campaña para manipular los sentimientos de una sociedad que no se da cuenta que la izquierda fascista se les está quedando con su país y ellos no necesariamente están buscando el bienestar de los estadounidenses, sino quedarse con sus riquezas. Estados Unidos pierde miles de millones entre las remesas fuera del país y el narcotráfico.
Trump ha levantado la economía, aumentado empleos y la confianza de los inversionistas pero la prensa "liberal no le quiere dar el crédito.
La estrategia de los demócratas es dividir a los republicanos, eso lo pretenden lograr desprestigiando a Trump en los medios, no informando la verdad y argumentando que lo que ha sucedido con la economía fue gracias a Barack Obama, nada más lejos de la verdad, ninguna práctica socialista que impuso el expresidente dio resultados positivos para la economía sino que la mantuvo practicamente estancada.
Ningún medio de prensa responsabiliza a Bill Clinton de ser el creador de la crisis económica que ha sufrido Estados Unidos durante los pasados años. Sin embargo acusan a Donald Trump de crear una crisis con China por imponerle aranceles a sus productos, también por renegociar los tratados de libre comercio con México y Canadá, donde eran injustos para los Estados Unidos y lo que hay que preguntarse es ¿De qué lado están? Obviamente de lado incorrecto, del lado de los enemigos de los estadounidenses que han visto a su nación caer en una polarización sin precedentes en la historia de este país.
¿Cómo afecta eso a los puertorriqueños?
A veces me pregunto de que lado está Ricardo Rosselló, porque debe investigar mejor al Partido Demócrata, a sus líderes y la ideología que profesan, porque como dice el refrán, dime con quien andas y te diré quien eres. La Estadidad para Puerto Rico no es issue de campaña entre demócratas, ni en New York ni en Florida, esa no es la agenda de ninguno de estos políticos.
Para los demócratas los puertorriqueños somos importantes porque en los estados tenemos el derecho a votar por ser ciudadanos, sin embargo, en la isla no tenemos ese derecho, nunca han apoyado la estadidad para la isla y ahora hacen el aguaje en la campaña, pero, son aliados del partido colonial de la isla, incluso con líderes que quieren la independencia. Cuomo ha usado la tragedia del huracán María para hacer campaña política y que los puertorriqueños en New York voten por él, pero no toca el tema del estatus ni con una vara de cien pies, mucho menos la Sra. Dixon.
El Partido Demócrata junto al Partido Popular Democrático, mantuvieron la isla en un estado de dependencia, control político y económico que no nos ha dejado avanzar y nos ha mantenido en una economía en deterioro hasta llegar a la crisis en que se encuentra.
Los opositores a todo lo que signifique mejorar la infraestructura mantiene a la isla en la incapacidad de manejar satisfactoriamente la electricidad, el reciclaje y los desperdicios sólidos, la corrupción y el narcotráfico es imparable, los políticos incapaces de legislar para hacer de la isla un centro de economía capitalista y no un estado benefactor, haciendo que la isla sea incapaz de convertirse en una sociedad de primer mundo, todos se quejan de tener una Junta Fiscal supervisando el que sigan hundiendo la isla hacia un estado fascista como lo ha sido hasta hora, y muchos podrán negarlo, pero las condiciones de la isla son innegables, la brecha entre ricos y pobres es real.
Lo menos que le conviene a los puertorriqueños es que ganen los demócratas. Pero ellos quieren hacernos creer lo contrario, que ellos serán los salvadores de la recuperación de la isla.
La verdad es que no hay fórmulas mágicas, lo que le conviene a los puertorriqueños es que se resuelva el estatus con la estadidad y venga una legislación para beneficiar el libre comercio, inversión de todo tipo para crear empleos, respetar las libertades y mantener los corruptos y los narcos en la cárcel. Para eso se necesita voluntad, sacrificio, trabajo y la valentía de decirle a los fascistas izquierdosos... ¡Fuera! no los queremos.
Esa sería la perfecta fiebre anaranjada.
Such is Life!
