Como siempre, la izquierda ensalsando a sus héroes de la
patria aunque estos hagan un llamado a matar y maten personalmente, Calle 13,
el artista revolucionario que con sus canciones de protesta tiene a los
izquierdosos como el Lcdo. Julio Fontanet y Hugo Chávez, gustándole el hip-hop,
me los imagino con su Ipod oyendo “Querido FBI”...
Queridos compatriotas...
Abogados, maestros, alcaldes, y chotas
Doctores, bichotes, bomberos, enfermeros
Contables, traqueteros, piragüeros, to' el mundo entero
Por mi madre que hoy me disfrazo de machetero
Y esta noche voy a ahorcar a diez marineros
Hoy tengo la mano aniquela' y a mano pela'
Les vo'a dar una pela pa' que vean que el gas pela
Nuestra bandera la han llena'o de meao
Murió desangra'o, mi gente, que murió desangra'o
Nunca arrodilla'o, lo van a tener que enterrar para'o
Con el machete al la'o
Que se activen La Perla, Lloren, Barbosa
Manuela, Caimito, Vista Hermosa
Covadonga, Camarones, Alturas, Torres Sabanas
Villa Esperanza, Sabana Abajo, Villa Fontana
Gladiolas, Villa Carolina, el pueblo de Trujillo
Las parcelas, San John, Monte Hatillo
Canales, San José, Río Grande, Luquillo
Puerta de Tierra, Santurce, Monasillo
Urbanizaciones, caseríos, el FBI se ha metido en un lío
Están jodidos, se jodio la Casa Blanca
Ahora voy a explotar con estilo
En el nombre de Filiberto Ojeda Ríos
Me tumbaron el pulmón derecho pero todavía respiro
Me voy a los tiros, pero todavía respiro
A los federales con piedras les tiro
Y si no hay piedras pues les tiro con güiro
Con lo que sea, tumbaron al hombre pero no a la idea
A to' los federales los escupo con diarrea
Me dan nausea, me dan asco
Yo se que estoy perdiendo los cascos
Por culpa de ustedes, jodios brutos
La Calle 13 esta de luto
Juzgue usted...
Los que fomentan esto son
los que dirigen el MUS
¿qué les
parece?
El Nuevo Día
05 Enero 2012
Calle 13 y Labatut
JULIO E. FONTANET
No existen dos personas más distintas que el puertorriqueño
René Pérez, conocido artísticamente como Residente de Calle 13, y el fenecido
comerciante Julito Labatut. Irónicamente, el destino les deparó una extraña
coincidencia.
Al que tenía un negocio de floristería en Río Piedras, la
Asamblea Legislativa le rindió un homenaje que, como recordarán, terminó como
el rosario de la aurora. A Calle 13, agrupación musical puertorriqueña
compuesta por Pérez y Eduardo Cabra (Visitante), luego de recibir un número sin
precedentes de Grammys recientemente (nueve) —y romper récord en relación a ese
galardón—, otra Asamblea Legislativa, pero del mismo perfil, no aprobó una
felicitación.
Ciertamente, lo acontecido en ambos casos es prueba
elocuente de la mediocridad e incultura de nuestros cuerpos legislativos, claro
está, con sus excepciones. No puedo olvidar cómo el último día de la sesión
ordinaria una senadora del PNP le envió una carta al gobernador para que vetara
un proyecto por el cual ella votó a favor. Ese mismo día, otro senador —esta
vez de minoría— criticó el mismo proyecto, pero advirtiendo que también votó a
favor. Ambos se excusaron alegando que el proyecto bajó al hemiciclo mediante
el desacreditado mecanismo de descargue y en altas horas de la noche, por lo
que no pudieron leerlo detenidamente. ¡Viva el doble cotejo de la
bicameralidad!
Ante una asamblea legislativa de esa naturaleza, no debe
sorprendernos que no entiendan la gesta lograda por Calle 13, lo que contrasta
con los múltiples reconocimientos recibidos por el grupo en naciones de este
hemisferio y que, incluso, hayan sido seleccionados como uno de los portavoces
del prestigioso rotativo El País en España. Resulta lamentable que el gobierno
penepé no le haya hecho el reconocimiento que se merece. Afortunadamente, ante
ese vacío, el Ateneo Puertorriqueño les otorgó la Medalla Betances.
René y Eduardo son mucho más que dos artistas talentosos del
“rap” urbano. En la mayoría de sus letras, apelan a la solidaridad y al reclamo
de derechos humanos, temas que otros artistas de ese género musical ignoran.
Para los de mi generación, equivalen a lo que fue Rubén
Blades en la salsa de los ochenta. Me llena de optimismo escuchar a muchos
jóvenes tararear sus canciones y percibir a través de ellas relatos de crítica
social y de eventos ocurridos en el hemisferio americano que de otra manera no
conocerían.
Por otro lado, dan ejemplo de lo que pregonan: han
participado y aportado a causas benéficas y recientemente realizaron un
concierto con entrada gratis para todos aquéllos que trajeran arroz y
habichuelas para ser distribuidos entre los necesitados. Se aseguran también de
que en sus conciertos haya siempre taquillas accesibles a todas las personas,
sin importar su capacidad económica.
De Labatut podríamos decir que sus “méritos” incluyen su
vinculación con actos de intolerancia contra el movimiento independentista del
País y contra la comunidad cubana residente en Puerto Rico que quería fomentar
relaciones y un diálogo conciliatorio con los cubanos residentes en la mayor de
las Antillas.
Cómo olvidar aquella entrevista en la cual se le preguntó si
tenía algo que ver con el asesinato de Carlos Muñiz Varela, a lo que respondió:
“No fue un asesinato sino un ajusticiamiento que se hizo a destiempo, porque
debió haberse realizado antes de que naciera”.
Irónicamente, el fallido y ridículo homenaje que le rindió
la Asamblea Legislativa permitió a una generación de personas jóvenes conocer
el terrible historial de Labatut y las denuncias en su contra por parte de
personas con información de primera mano.
En medio de la intolerancia que ha distinguido al gobierno
del PNP, no debe sorprendernos lo aquí expuesto. Afortunadamente, somos un
pueblo con mucha fortaleza y capacidad de cambio. Y noviembre está a la vuelta
de la esquina.
Julio Fontanet no puede hablar de intolerancia, los
estadistas hemos sido demasiado tolerantes con los revolucionarios terroristas.
Ese es el precio de la democracia, permitirle a ellos todas sus manifestaciones
y quemas de banderas, insultos y falsas acusaciones. Julio Fontanet pertenece
al Colegio de Abogados, tienen a la prensa a su favor, ¿si tan seguros están de
la complicidad de Julito Labatud en la muerte de Carlos Muñiz Varela por qué no
hicieron su propia investigación y buscaron las pruebas? A Carlos Romero
Barceló lo tildaron de asesino por declarar héroes a los policías en el caso
del Cerro Maravilla, para luego de años de investigación enterarnos que todo
era una patraña para destruir su gobierno. Las cosas como son.
Para Julio Fontanet y Calle 13, el machetero ponebombas,
Filiberto Ojeda Ríos, era un héroe, estuvo involucrado en el robo de la Wells
Fargo, los asesinatos de los Marines en Sabana Seca, el ataque al edificio
federal, la destrucción de los aviones en la Base Aérea Muñiz, se enjuició, se
encarceló, y se escapó viviendo en la clandestinidad por muchos años, hasta que
lo descubrieron y lo buscaron, el hombre no se rindió ni se entregó, murió
asesinado por el FBI, era un criminal, no era un santo, las cosas como son.
Pero claro, era un machetero, un anarquista, un violador de
la ley, para Fontanet y Calle 13 era un héroe, ¿qué parámetros tienen del bien
y el mal? Me parece que los tienen trastocados, así son los socialistas
neocomunistas.
Vivimos en una sociedad que hoy se pregunta el por qué de
tanta violencia, balas al aire y sobre mil asesinatos en el 2011, pero esos
mismos que se preocupan por esto, ¿por qué no le preguntan a Calle 13 por qué
fomenta el odio a la ley y el orden en sus canciones? Si los jóvenes hoy en día
no respetan la autoridad es por los Calle 13 de la vida que lo fomenta en sus
canciones. Ellos influyen en toda esta problemática porque cada vez que matan a
un policía en el cumplimiento de su deber, como ocurrió el 1ro de enero, una
familia buena sufre. ¿Es esto justo?
Julito Labatud, un cubano exiliado que luchó contra la
tiranía de Fidel Castro en Cuba, se estableció en Puerto Rico, tuvo su negocio
de floristería y vivió de eso. Nunca violó la ley y por unas declaraciones que
hizo ejerciendo su derecho a la libre expresión, Julio Fontanet lo condena.
No podemos olvidar que los independentistas, socialistas y
neocomunistas odian al exilio cubano llamándolos gusanos como les enseñó su
otro héroe Fidel. La revolución cubana fomentó el odio al exilio cubano, al imperio yanqui y
sembró su mezquindad en Puerto Rico.
Lo más irónico es que quienes defienden su derecho a la
libertad y expresarse con todo su odio al imperio yanqui son los mismos que se
lo niegan a los cubanos exiliados que tuvieron que dejar sus negocios, su
familia y su país huyendo del paredón de fusilamiento del Che Guevara, Fidel
Castro y su hermano Raúl.
Los puertorriqueños tenemos mucho que agradecerle al exilio
cubano. Nos abrieron los ojos y nos demostraron quienes eran los delincuentes.
Vinieron a Puerto Rico a trabajar decentemente, aportaron al país con su
preparación y talentos, gracias a ellos no caímos en las garras del comunismo.
Estamos en deuda con ellos.
Personalmente me dediqué a conocer la verdadera historia a
través de libros escritos por Carlos Alberto Montaner, Carlos Franqui, Cristina
Saralegui, Emilio Estefan, Zoe Valdés y una persona muy cercana a los Castro su hermana Juanita Castro, que han narrado su experiencia y
las de otros, el exilio cubano ha sufrido, sufre y sufrirá por culpa de los
socialistas-comunistas. La izquierda en Puerto debería pedir perdón por
defender tanta mezquindad.
¿Se le va a dar un reconocimiento a Calle 13 fomentando la
violencia, el odio al FBI y a los que creemos en la estadidad? Entonces ellos
se reirán de nosotros diciendo “los insultamos, nos meamos encima, los atacamos
y como quiera nos galardonan, que estúpidos son.” Hay que ser bien pretencioso
y sinvergüenza para pensar así.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Jennifer
González fue víctima de esta delincuencia terrorista, cuando esa noche los
izquierdosos trogloditas dirigidos por Tito Kayak irrumpieron en el Capitolio y
rompieron el cristal que protege la Constitución entre otros destrosos, creando
terror entre los asistentes, eso Julio Fontanet no lo menciona en su columna,
¿está este acto terrorista justificado? Claro que no. ¿Quieren enterarse que
pasó ese día? Vea: http://www.lanuevacuba.com/nuevacuba/notic-06-03-3199.htm
La izquierda troglodita se cree que tienen licencia para
delinquir y el Colegio de Abogados siempre está dispuesto a defender a estos
delincuentes que se escudan detrás de una causa para hacer sus fechorías, ¡ya
está bueno!
Son delincuentes y esta es la verdad, causa preocupación que
los jóvenes vean a Calle 13 como un héroe, esto es parte del problema que
tenemos en Puerto Rico con la criminalidad, un artista que fomenta la violencia
es parte del problema y no podemos obviar esta realidad.
Así es que a Julio Fontanet le digo, en la Legislatura de
Puerto Rico no hay espacio para los delincuentes izquierdosos como Calle 13, si
en el Ateneo le quisieron hacer un homenaje a él y al anarquista Ramón Emeterio
Betances, esa es su prerrogativa, lo más que me molesta es que sea con fondos
públicos, claro los neocomunistas pueden pero los estadistas no, así es la vara, muy larga para ustedes y bien cortita para los demás.
Los puertorriqueños estamos hartos del discurso de la
izquierda troglodita justificando a esos héroes anarquistas, esto es una
sociedad de ley y orden, queremos la paz, queremos trabajar, ganarnos el dinero
con el sudor de nuestro trabajo, no robando, queremos libertad y respeto a los
derechos humanos, los mismos que ustedes no le respetan a los que no piensan
igual, por eso es que el 6 de noviembre del 2012 escogeremos la estadidad en vez de la independencia
apoyada por Hugo Chávez y los Castro. Votaremos por Luis Fortuño y por una legislatura estadista. Por eso ustedes no pasarán de un 5 o 6
porciento, es más, siendo optimista
no pasarán de un 10 y ustedes lo saben.
Such is Life!